Bienaventurados sean todos, pues el mesías llegó...
... pero que Dios os pille confesados porque trae toda la razón consigo y no acepta ninguna más.
No dejen que los niños se acerquen a él si los niños se acercan a él de propio intento.
Si van obligados es mejor.
Mejor aún si van engañados.
Muchísimo mejor si están ciegos.
Y sin rechistar.
Es perfecto.
Aún así, no le digan lo contrario.