Que no se me termine el boli
lunes, 30 de agosto de 2010
Una de cal y otra de arena
Si todo viniera seguido de un gran silencio sería más seguro el olvido.
La frialdad de las camisas y el calor de los botones.
La suavidad de una barbilla y la incomodida de una melena.
El silencio el silencio el silencio y las letras.
Con los ojos cerrados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Entrada más reciente
Entrada antigua
Inicio
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario