martes, 21 de julio de 2009

Y en efecto.


Siempre es mejor decir que no lo viste, antes que decir que no pasó. Siempre. Así nunca te podrán quitar la razón. Nunca. Pero no pasó.

Miré a tu ventana. Era poca la ilusión de encontrarte asomado para ver si me veías. Era inexistente la esperanza de encontrarte asomado para ver si me veías. Pero miré.

En efecto, no estabas ahí, pero siempre es mejor decir que no te ví, antes que decir que no estuvieras.

(Para que no puedas decir que no miré. Para que no mientas diciendo que me sí viste.)



No hay comentarios:

Publicar un comentario